sábado, 31 de diciembre de 2016

Un diciembre diferente.

En junio de 2016 salí a buscar una vida digna, llena de oportunidades pues en mi país se me negó, así como se le niega a la mayorías de los Venezolanos que creemos en la Justicia, Igualdad, Libertad y sobre todo los que creemos en democracia. 

Hace unos meses mi vida era simple, profesora a tiempo completo de bachillerato, haciendo política pero la política de verdad, esa que no la maneja el dinero ni la corroe el chantaje si no que combatimos arduamente con ello para que nuestro país sea diferente, un cigarrillo con café junto a mis vecinos, los sábados corregir el trabajo de la semana junto a mi hermano, los pocos días libres las conversas en familia, la salida con los amigos.

Aquella risa inocente de domingo con mis primos mientras tomábamos te, aquellas salidas sin compromiso previo ni futuro, enamorar y no enamorarme. Así la vida funcionaba mejor.

Hace unos meses deje mi país, deje a mis amigos, deje mis costumbres, deje a los mios para pasar a ser una extranjera, si, una extranjera con ciudadanía pero extranjera al fin.

Aquí en el Ecuador, he conocido a mi familia que como toda familia es disfuncional, sus altos y bajos pero familia al fin, he conocido gente muy buena como doña olimpia y la señora mariana, como cristian que es de nuestra edad, ellos son humildemente quienes nos prestaron desde un plato de comida hasta un pequeño televisor.

Conocí a Elena en mocache, la señora de los tapados, ella junto a su esposo oswaldo invitaron a unos Venezolanos a pasar las fiestas con ellos, nos enviaban comida, nos ofrecieron su lavadora y es justo allí cuando termino de entender la premisa "Aun queda gente buena". Justo allí es cuando digo, la gente mas humilde quien no tiene nada, lo da todo, mientras que quien lo tiene todo no se sencibiliza y la excusa es tratar de la peor manera a quien mas lo necesita.

En el Ecuador experimente pasar hambre, arrechera y algún día que otro algo de felicidad.

En el Ecuador conocí el amor, en el Ecuador lo he mantenido, sus altos, sus bajos, pero manteniendo un 2 que se iba a convertir en una relacion de medio año habiamos "Superamos el mito"; aqui es donde la distancia ha hecho del amor fortaleza o eso yo pensaba, habia hecho del amor paciencia; Durante meses habia sido la razon de mi alegria

En el Ecuador me dieron la oportunidad que tanto se me negaba en mi país, fui ponente de uno de los congresos juveniles mas importantes de Latinoamérica, fui asesora en políticas juveniles y campañas electorales, asesora en estrategias electorales, fui engañada tan bien como en Venezuela por políticos que carecen de principios, valores y ética, esos mismos que hoy en día pretenden con liderazgos de chequera llegar a una curul en la Asamblea Nacional del Ecuador.

Pero tan bien conocí las 24 provincias del Ecuador, sus playas, sus paramos, desde el ceviche y el bolon, hasta el tapado y en zango.

Este 2016 cierra en un ciclo que aunque difícil complicado, me hace valorar a quienes aleje de mi por mis actitudes, anhelar estar en familia y extrañar a aquellos que tanto lastime. Dicen: "Amaras a quien no te ame por no amar a quien te amo".  Solo espero sea el ultimo karma del año.

Este 2016 deja a mi hermano Nixon Leal en libertad pero esperando a mi amigo y Diiputado Renzo Prieto, no solo el si no todos los presos de conciencia.

Este 2016 deja una Venezuela triste y en desolación pero fe tengo de que pronto todos los que nos forzamos a salir del país, regresemos y este 2017 la meta es regresar a mi Venezuela a Recuperar mi vida, la vida que me obligaron a dejar.

Que este 2017 el Ecuador tome conciencia, que salga adelante y que no caigan en un regimen dictatorial como lo es el Venezolano tristemente.

Feliz año a mis paisanos en el extranjero y a los que están en nuestra patria, feliz año a mis bachilleres y a los casi bachilleres futuro de nuestro pais; feliz año a mis familiares, en especial a mi madre y mi hermano, a mi sobrino y a mis amigos. Feliz año Venezuela. Fuerza y Fe.

Emily Vera G